La clínica estética nos contactó con el objetivo de aumentar la cantidad de consultas y reservas de turnos desde medios digitales. Sin embargo, al analizar su situación inicial, encontramos varios puntos críticos:

• Sitio web desactualizado y sin identidad visual profesional:
  El diseño del sitio no reflejaba el nivel de servicio que ofrecían. Las imágenes eran genéricas, la paleta de colores no transmitía confianza ni estética, y la navegación era confusa, especialmente desde dispositivos móviles.

• Ausencia de estructura de conversión:
  No había formularios optimizados, llamados a la acción claros ni botones de contacto visibles. Esto generaba que los usuarios interesados abandonaran el sitio sin dejar sus datos.

• Cero posicionamiento en Google (SEO):
  No aparecían en búsquedas relacionadas a sus servicios estéticos. Los textos del sitio no estaban pensados para posicionar, y las configuraciones técnicas estaban incompletas (títulos, metadescripciones, velocidad de carga).

• Inexistencia de estrategia digital unificada:
  Las redes sociales y las campañas pagas no estaban conectadas con el sitio web. No había seguimiento de resultados, ni herramientas de analítica, ni remarketing activo. Tampoco conocían el comportamiento de los usuarios ni podían medir el retorno de su inversión.

• Dificultades para agendar turnos y responder consultas:
  Todo se hacía de manera manual, lo cual generaba demoras, errores y pérdida de oportunidades.